Agosto antiguo

Aquí tiene esta imagen del mes de agosto según el calendario agrícola, bellísima pintura mural en el Panteón de San Isidoro de LeónImagenEl campesino del siglo XII, cuyas labores se representan mes a mes, clásico mensario, en doce hermosos frescos, hace con el trigo algo propio de agosto, que a urbanitas actuales se nos escapa, pero que es, evidentemente, trabajo. Dicen los que saben que  se representa una dura labor: separar el grano de la paja. En agosto.

En agosto, el Gobierno ha modificado por decreto la normativa sobre relaciones laborales: el Estatuto de los Trabajadores, y una pila de normas laborales más. Aprobado 2 de agosto, publicado en el Boletín Oficial del Estado el 3, sábado, entrada en vigor el domingo 4. Pinche enlace a texto de la norma aquí.

La publicidad de las normas no es solo obligación de mínima decencia política. Y el trabajo es bastante más que el trabajo semiesclavo de los siervos. No se engañe por la belleza de esa poética, ingenua y estilizada imagen. Ese campesino no era un trabajador. Era un siervo. Si no siervo en el sentido jurídico estricto del término, que habría que verlo, lo era en el sentido amplio de agotadoras jornadas, salarios míseros, sociedad injusta y precariedad. Como lo que se pretende que sean los trabajadores ahora. En agosto; ahora es agosto casi todo el año.

Y como era poca ocultación reforma laboral  gordísima en agosto y sábado, queda además «casualmente» encubierta con Gibraltar. Pero qué aburrimiento y qué repetitivo, oiga, lo de los gibraltares de despiste.

Lo único que esta bloguera le gusta de TODO lo que por unos y otros se ha dicho y hecho en, y en relación con, Gibraltar desde el Tratado de Utrecht, es su mención con interesantes reminiscencias en el célebre monólogo interior del personaje Molly Bloom, en el Ulises, de James Joyce, quizá la más importante obra literaria del siglo XX. Algo hay que decir de Gibraltar, y esta bloguera, constructiva, prefiere citar el Ulises del Sr. Joyce,  autor que escribió apenas de pasada sobre ello. Este niño es Joyce, cuando era pequeño.

Puestos a añadir fotos, se incluye la de la estatua que en Gibraltar hay del personaje de Molly Bloom, la cual en el libro recuerda, en Dublín y en una noche de insomnio, bastantes cosas, incluyendo lo que le pasó en Gibraltar años antes, como perder la virginidad. El Sr. Joyce era irlandés, de una Irlanda que era entonces aún de Gran Bretaña; es feo apropiarse de lo que pertenece a otro país. ¿A que si le digo que estuvo prohibido este libro, en Gran Bretaña y en otros países, en pleno siglo XX, le apetece más leerlo?

Y ahora se va a dejar por un momento esos repetidos gibraltares de despiste -nada por aquí nada por allá- y literaturas y volvamos al BOE. Se incluye una imagen de la Gaceta de Madrid, predecesora del BOE. Como esto es cada vez más antiguo, se ha escogido una cabecera de 1826, lamentando mucho no haber podido encontrar una más antigua.

Observe el nombre: «Real Decreto-ley 11/2013, de 2 de agosto, para la protección de los trabajadores a tiempo parcial y otras medidas urgentes en el orden económico y social«. Como usted sabe, el Gobierno todas las medidas que tima, digo que toma, son de protección de los trabajadores, a tiempo parcial, completo o con contratos de medio minuto, así que hasta ahí bien; y en cuanto a medidas urgentes, deben de serlo muchas, cuando ya llevamos once decretos en lo que va de año, o sea, normas que debían haber seguido tramitación vía Cortes, pero las aprueba el Gobierno, único capaz de valorar la extraordinaria y urgente necesidad de modificar, en este  caso, las tropecientas normas que se modifican, que solo en cuanto a laboral son ocho o nueve de primer orden, incluyendo modificar normas que el propio Gobierno sacó hace poco. Cómo no deducir del nombre del decreto que va a tratar de infraestructuras y transporte, vivienda, impuesto sobre sociedades y Entidades Locales, además de temas laborales. Santo y bueno, que son más sabios que nosotros y hay que agradecérselo, y aciertan tanto cuando sacan normas como cuando modifican las que ellos mismos sacaron antes.

Claro que, por ejemplo, varios sindicatos consideran que esta reforma laboral TAMBIÉN es inconstitucional, y no son los únicos en preocuparse por eso y por la injusticia y precariedad que generará la reforma, pero no se va a perder el tiempo en esas fruslerías,  ni los medios de comunicación tampoco, que si acaso ya dirá algo el Tribunal Constitucional dentro de los habituales ocho o diez años, cuando lleve ocho o diez años aplicándose. El Gobierno, como es notorio, no tiene más intereses que los generales, personificados, eso sí, en ellos, los bancos y las grandes empresas, y, está científicamente comprobado, no miente nunca.

Y observe qué bonito. El preámbulo de esta norma, que según el título va de temas laborales y «otras medidas«, empieza diciendo lo siguiente:

«La situación de crisis por la que está atravesando nuestro país exige la adopción de reformas que contribuyan a la recuperación del crecimiento económico y la creación de empleo, en el plazo más corto posible.

Desde hace año y medio se vienen adoptando importantes reformas en los sectores de infraestructuras, de transportes aéreo, terrestre, ferroviario y marítimo y en el sector de la vivienda, para incrementar su competitividad y su eficiencia.

Sin embargo [sic], debe mantenerse el impulso de las reformas, por lo que procede seguir adoptando medidas que se estiman necesarias.«

Ese «sin embargo» es una ma-ra-vi-llo-sa muestra de literatura oficial, desconocimiento del castellano o lapsus freudiano. Sin embargo, esta bloguera prefiere el Ulises.

Ah, y a todo esto, las más de 40 páginas de normativa sobre todo tipo de temas impredecibles por el título, entran en vigor al día siguiente de publicarse, o sea, domingo. Pero esto sin embargo ya sucede con innumerables normas complejísimas y farragosas de vigencia inmediata y contenido poliédrico que se publican en sábado desde hace ya tiempo. El Gobierno impone lectura sin falta del BOE cada sábado, detectar las decenas de normas que afecten a cada cual mirando hasta el final cada ley porque no sale en el título su verdadero contenido, interpretar, apreciar hasta las derogaciones tácitas, y estudiar los fines de semana y gratis para aplicarlas de inmediato, si es preciso, el mismo sábado o con suerte el domingo, y de forma coordinada, que cómo va a ser que cuando se aplique, con las prisas, cada cual haga de su capa un sayo.

La otra posibilidad, sin embargo, es que el Gobierno, además de sacar reformas laborales que muchos creen injustas e inconstitucionales, aparte de ineficaces, esté en este caso, y muchos otros, pidiendo el imposible de detectar, analizar e interpretar instantáneamente normas complejas, farragosas, imprevisibles y mal redactadas. O sea, que le importe un pimiento que esta norma, y todas, se apliquen bien, mal o regular o que la gente ni se entere. Incluyendo en «gente» los que han de aplicar la norma -jueces, funcionarios judiciales y no judiciales-, asesorar sobre ella y los afectados. Y que saque normas a troche y moche en temas gravísimos, sin técnica legislativa mínimamente aceptable y con precipitación chapucera intolerable, por no hablar del dato de que se haga en agosto o en sábado aposta para que no cause revuelo porque cercene derechos.

Pero eso, sin embargo, queda descartado, que está también científicamente comprobado que no hay un solo caso de cosas importantes que al Gobierno le importen un pimiento, y chapuzas legislativas y de otra índole, hasta ahora, ninguna, y de ocultaciones y cercenamiento de derechos, tampoco.

Sin embargo, por motivos que esta bloguera no acierta a aplicarse, le ha venido a la cabeza otra imagen medieval:  la «Alegoría del mal gobierno», fresco del siglo XIV de Ambrogio Lorenzetti, en Florencia, igual que no se explica que le venga a la cabeza la expresión «sin embargo«.

Pero héteme aquí que sin embargo la técnica legislativa del decretazo es efectiva y tiene muchísimo que ver con Gibraltar, parece. Gracias a ella van a devolver Gibraltar, parece. Un anterior decreto, de unos días antes, que TAMBIÉN se publicó en el BOE un sabado y se convalidó a toda prisa sin que nadie se enterara ni explicaciones, se refería a compra urgentísima de aviones, tanques y buques de guerra, ver post Sablear, por importe de 877M€. Por fin sabemos por qué era urgentísimo. El Gobierno, al parecer, tenía datos que sin embargo no podía explicar: preveía inmediata guerra con Gran Bretaña, o quería evitarla con el sistema tradicional si vis pacem para bellumGran Bretaña, asustada de que un país en ruina sin embargo gaste un pastón en armamento urgente, va a devolver Gibraltar, porque es imposible enfrentarse con gente tan aguerrida que destina cuantiosos recursos a eso habiendo sin embargo niños que pasan hambre -y datos insignificantes de niños que pasan hambre en Españajistán en dos posts de este blog, Bastardos y Hética-. Vamos, es de suponer, ¿no?, que de eso va esta historia. ¿O no?

julio y agosto -calendario agrícola capilla de San  Galindo en Campisábalos- GuadalajaraY ahora puede ver dos figuras más del calendario agrícola, esta vez en piedra. Julio y agosto de la capilla de San Galindo en Campisábalos, Guadalajara. ¿Que se ve muy mal? Imagine cómo se verá la reforma laboral, además en agosto y en sábado, y cómo se quedan de piedra los que se la han estudiado.

Y cuando alguien se queda de piedra, le resulta más difícil separar el grano de la paja, trabajo ya duro de por sí; sobre todo en agosto, y lo prueba este post tan rollo. Por ejemplo, en los medios de comunicación, tan amigos como el Gobierno de apoyar granos mediante el sistema de taparlos con paja. La reforma laboral -de la técnica legislativa ya ni hablamos-, que afecta gravemente a millones de personas, sin embargo sale poco o nada en portadas y telediarios. Pero sin embargo sí se habla mucho de cosas aptas para clásicas maniobras de despiste:

  • de indulto y desindulto a un pederasta -historia que enseguida se olvidará porque se dejará de tratar de ello cuando ya no interese-, pero sin embargo no hablan de por qué existen los indultos y por qué atacan la propia esencia del Estado de Derecho, post Indultos,
  • y de Gibraltar.

Cuánta paja para ocultar grano.  La de este post al menos va de arte medieval. Sin embargo usted quizá prefiere torneos deportivos y liga de fútbol. Disculpe.

 Verónica del Carpio Fiestas

Acerca de Verónica del Carpio Fiestas

Abogada desde 1986. Colegiada ICAM nº 28.303 Profesora de Derecho Civil en el Departamento de Derecho Civil UNED desde 1992 Despacho profesional: C/ Santísima Trinidad, 30, 1° 5, 28010 Madrid (España) Tf. (+34) 917819377 e-mail veronica@delcarpio.es En Twitter @veronicadelcarp
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Una respuesta a Agosto antiguo

  1. Jaime Borrego dijo:

    Buena reflexión, como siempre y además amena, también como siempre. El día tres de agosto, cuando leí en el BOE el RDL 11/2013, pensé, ¿Por qué estos títulos de los RD?.

    Está claro, mientras más inseguridad jurídica se cree, mientras más complicado se haga la aplicación del Derecho «mejor». Mejor porque habrá más litigios (no pleitos) pero el que quiera ir a pleitos, pues ya sabe, a pagar tasas, esas tasas que todo jurista dice que no es conforme a nuestra Constitución y que alejan al justiciable de los juzgados.

    Felices verano.

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