Esa Europa que se suicida

La terrible foto del niño sirio refugiado ahogado (¿se acuerda aún usted del nombre?) ha conmovido el corazón de muchos; de quienes tienen corazón. Y mire usted esta otra foto:

Hungría

¿Cree usted por la escenografía que es la foto de un peligroso delincuente esposado entre dos policías, un delincuente que además de peligroso tiene una grave enfermedad contagiosa?

No. Está usted viendo la foto de un refugiado que ha sido condenado por un tribunal de Hungría, país de la Unión Europea, por el delito ya tipificado en la normativa penal húngara de haber pasado la frontera ilegalmente, y a quien consideran un virus, no una persona con derechos. Aquí tiene usted la noticia:

Hungría2

Es decir, está viendo usted la foto  de una persona que es víctima de un Estado, de un Estado que pertenece a la Europa de los derechos, de un Estado que ha decidido saltarse la legalidad internacional de asilo hasta tal punto que no solo no lo respeta sino que considera huir de la guerra un delito en sentido penal del término, y de un Estado que pertenece a una Unión Europea que ha decidido mirar para otro lado ante una práctica manifiestamente contraria a la legalidad internacional, los valores democráticos, la mínima humanidad y a la propia esencia de la Unión Europea.

Si la Unión Europea es algo, es la Europa de los derechos que incluye el derecho de asilo. O eso dicen que es. Pero si en la Unión Europea vamos a ser como una dictadura cualquiera en la que los tratados internacionales no se respetan ni en los derechos más básicos, Europa fracasa. Ha fracasado ya. Esa gravísima foto lo demuestra. Porque un país de la Unión Europea ha decidido saltarse la propia normativa europea, flagrantemente, en materia esencial, gravísima, despreciar los valores mínimos de un Estado de Derecho, y los demás países miran para otro lado.

La expulsión automática de los migrantes y las penas de prisión por cruzar ilegalmente la frontera son castigos injustos que van en contra de los tratados europeos de derechos humanos y los valores democráticos fundamentales de la Unión Europea.

No digo que la foto me da vergüenza, que también, porque lo que me da es muchísimo miedo. El miedo de pensar que quizá es la foto de contenido más grave que he visto en muchos años. El miedo de pensar que un Estado de la Unión Europea ha decidido comportarse como una dictadura, saltándose la legalidad internacional y de forma contraria a la mínima humanidad, y que la Unión Europea no hace nada al respecto. El miedo de pensar que cuando los derechos no se respetan en Hungría, si mañana le pasara eso a mi familia, a mis amigos, a mis vecinos, a mí, también la Unión Europea, una Unión Europea que ha decidido suicidarse, miraría para otro lado.

Porque la Unión Europea ha decidido suicidarse, y a usted, que lee esto, no le ponen esta foto en portada ni le explican los grandes medios de comunicación lo que significa.

Y un tuit como este de Amnistía Internacional lleva 66 retuits. Solo. El estornudo de un futbolista consigue centenares.

1Y si a usted le conmovió el corazón la foto del niño ahogado, quizá la foto de ese señor a quien han impuesto una condena en un tribunal penal de un país de la Unión Europea por el delito de huir de la guerra, le conmueva el cerebro. Porque estamos en la cuesta abajo, cayendo en picado en el respeto mínimo de los derechos y los valores democráticos de Europa, está en juego la propia esencia de la Unión Europea, y o paramos, o esto pinta mal. Muy mal.

Y no para los refugiados, que también: para los ciudadanos de la Unión Europea.

Verónica del Carpio Fiestas

Llamamiento. La ONG Rights International Spain, en colaboración con otras ONGs, promueve una campaña internacional de cartas al presidente de Hungría. Se puede firmar por internet aquí. Yo ya he firmado y la he hecho mía: el párrafo en negrita es transcripción de un párrafo de la carta.

 Y hago además otra cosa, lo poco que está en mi mano: este post, que se puede difundir con tu ayuda. La gente tiene que saber que lo que está en juego no es solo la vida y los derechos de los refugiados, con ser eso muchísimo, sino la propia esencia democrática de la Unión Europea.

#RefugeesWelcome

La ONG Amnistía Internacional recomienda hacer y difundir fotos con el cartel #RefugeesWelcome, y hacerlas llegar con copia a Sr. Presidente del Gobierno, vía redes sociales. Aquí la mía.

P.S. El Consejo General de la Abogacía Española acaba de difundir un contundente comunicado en defensa de los derechos de los refugiados, oponiéndose al trato inhumano que están recibiendo, y diciendo en términos clarísimos que es inconcebible y contrario a la normativa internacional y a los derechos humanos que se considere delito el mero cruce de la frontera, y manifiestando que la UE deberá imponer sanciones a Hungría si persiste en su actitud contraria a los pilares esenciales de la UE. Enlace a comunicado, aquí.

2º P.S. El organismo internacional de refugiados de la ONU ha publicado un comunicado contra la criminalización del cruce de fronteras. Enlace aquí.

13er. P.S. La protección de los refugiados, dice la asociación judicial Jueces para la Democracia, no tiene carácter de caridad opcional sino de deber legal. Comunicado aquí.

Acerca de Verónica del Carpio Fiestas

Abogada desde 1986. Colegiada ICAM nº 28.303 Profesora de Derecho Civil en el Departamento de Derecho Civil UNED desde 1992 Despacho profesional: C/ Santísima Trinidad, 30, 1° 5, 28010 Madrid (España) Tf. (+34) 917819377 e-mail veronica@delcarpio.es En Twitter @veronicadelcarp
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